La Real Sociedad sigue creyendo en el milagro. El equipo de Lotina tomó oxígeno con su victoria por 3-1 ante el Mallorca y resolvió a su favor la primera de las trece finales que tenía por delante. Savio se estrenó marcando con la camiseta blanquizaul pero no tardó mucho Ibagaza en igualar el encuentro. Entonces reapareció Darko Kovacevic, que llevaba sin marcar desde octubre de 2005, y adelantó de nuevo a los suyos. Anoeta casi se viene abajo. Ya en el tiempo de descuento, y con diez desde el minuto 72 tras la expulsión de Mikel González por doble amarilla, Xabi Prieto puso la puntilla y sentenció el encuentro. La Real se aferra a los números para soñar con la salvación. Los locales sabían que sus aspiraciones de seguir en Primera pasaban por ganar al Mallorca, de ahí que salieran ya mentalizados de la necesidad de los tres puntos. Sin embargo, la primera aproximación con peligro fue para Ibagaza, cuyo remate en el minuto 16 se marchó fuera de la portería de Bravo.
Primer tanto de Savio Después llegó el arreón local. Germán Herrera tuvo en sus botas dos oportunidades consecutivas para marcar pero no hubo suerte. Hasta entonces el guión era el de los últimos partidos de los 'txuri urdin'. Dominio de la posesión, llegadas al área rival, buenas oportunidades pero falta de puntería o de suerte. Esta vez, la fortuna no dio la espalda a los donostiarras y Savio en el 26 se estrenó marcando con la Real. El brasileño culminó una gran jugada de Xabi Prieto y su disparo entró en la portería de Moyá tras dar en Jankovic, Valera y en el poste. Sólo doce minutos después Ibagaza, con un gran zurdazo, empataba el encuentro. Un tanto merecido porque el Mallorca lo llevaba buscando un rato pero que cayó como un jarro de agua fría sobre Anoeta.
Reapareció Kovacevic Cuando la 'parroquia' local ya volvía a pensar en el infierno de Segunda reapareció Kovacevic para dar a los suyos la alegría de la tarde. El serbio volvía a recuperar su olfato goleador año y medio después y, tras irse de Ballesteros, mandó el balón a la red de disparo raso. Corría el minuto 44 y los locales se fueron a los vestuarios con la moral alta. En la segunda parte la Real fue perdiendo fuelle mientras el Mallorca le iba comiendo terreno. La polémica llegó el el minuto 72 cuando Mikel González vio la segunda amarilla y dejó a los donostiarras con diez teniendo por delante más de veinte minutos. Entonces llegaron las mejores ocasiones para empatar, pero los bermellones no tuvieron suerte de cara a la portería.
La puntilla Los locales estaban pidiendo ya la hora ante el asedio visitante a la portería de Bravo, que una vez más salvó a los suyos en varias ocasiones, cuando Pérez Burrull determinó cinco minutos de descuento. Xabi Prieto aprovechó el último suspiro para hacer un par de sombreritos a Ramis y sentenciar. A la Real le quedan por delante doce finales. Los de Lotina suman su tercera victoria de la temporada y, como se suele decir, van a morir matando. Mientras el Mallorca ha quedado tocado tras esta derrota y se complica la vida.
Primer tanto de Savio Después llegó el arreón local. Germán Herrera tuvo en sus botas dos oportunidades consecutivas para marcar pero no hubo suerte. Hasta entonces el guión era el de los últimos partidos de los 'txuri urdin'. Dominio de la posesión, llegadas al área rival, buenas oportunidades pero falta de puntería o de suerte. Esta vez, la fortuna no dio la espalda a los donostiarras y Savio en el 26 se estrenó marcando con la Real. El brasileño culminó una gran jugada de Xabi Prieto y su disparo entró en la portería de Moyá tras dar en Jankovic, Valera y en el poste. Sólo doce minutos después Ibagaza, con un gran zurdazo, empataba el encuentro. Un tanto merecido porque el Mallorca lo llevaba buscando un rato pero que cayó como un jarro de agua fría sobre Anoeta.
Reapareció Kovacevic Cuando la 'parroquia' local ya volvía a pensar en el infierno de Segunda reapareció Kovacevic para dar a los suyos la alegría de la tarde. El serbio volvía a recuperar su olfato goleador año y medio después y, tras irse de Ballesteros, mandó el balón a la red de disparo raso. Corría el minuto 44 y los locales se fueron a los vestuarios con la moral alta. En la segunda parte la Real fue perdiendo fuelle mientras el Mallorca le iba comiendo terreno. La polémica llegó el el minuto 72 cuando Mikel González vio la segunda amarilla y dejó a los donostiarras con diez teniendo por delante más de veinte minutos. Entonces llegaron las mejores ocasiones para empatar, pero los bermellones no tuvieron suerte de cara a la portería.
La puntilla Los locales estaban pidiendo ya la hora ante el asedio visitante a la portería de Bravo, que una vez más salvó a los suyos en varias ocasiones, cuando Pérez Burrull determinó cinco minutos de descuento. Xabi Prieto aprovechó el último suspiro para hacer un par de sombreritos a Ramis y sentenciar. A la Real le quedan por delante doce finales. Los de Lotina suman su tercera victoria de la temporada y, como se suele decir, van a morir matando. Mientras el Mallorca ha quedado tocado tras esta derrota y se complica la vida.
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