FÚTBOL, SEGUNDA B Orbegozo, el salvador del Sanse Un tanto del azpeitiarra sirvió para doblegar a una floja Gimnástica. Ambos equipos jugaron con un hombre menos más de media hora por las expulsiones de Pérez y Camus

El Sanse volvió a dar la de cal. Y ya van unas cuantas esta temporada. El filial txuri urdin jugó un buen partido y derrotó a una floja Gimnástica de Torrelavega con todo el merecimiento. Ganó porque lo mereció. Porque le puso más empeño. Porque no se arrugó cuando jugó algunos minutos en inferioridad. Ganó porque fue mejor.
Los de Meho Kodro ya son octavos y están a sólo tres puntos del play off. Un dato revelador de lo bien que lo están haciendo. Tiene mucho mérito subir de Tercera y competir con equipos mucho más curtidos que tú. El Sanse lo está haciendo sin desmerecer su papel formativo. Y teniendo, además, el papel protagonista en la mayoría de los partidos.
Ayer no jugó Martínez, pero Gaztañaga y Cadamuro volvieron a estar sobrios. Seguros. Contundentes. Ramírez apenas pasó apuros. Y Jonatan demostró que será un hombre muy útil. Tiene varias cosas muy interesantes. Y Kodro así se lo hizo entender dejándole los noventa minutos en el terreno de juego.
El faro de este equipo, Illarramendi, no tuvo sin embargo su mejor tarde. Se le vio impreciso y con poca presencia. Raro en él. No fue el hombre decisivo que suele ser. Aunque tuvo la primera ocasión con una falta sacada con mucha intención. El portero, atento, despejó el peligro.
Con un Barcina apagado y un Aldalur intermitente, Orbegozo y Jonatan se aliaron para llevar el peligro. Precisamente el azpeitiarra dispuso de dos buenas oportunidades, pero en la primera tiró flojo y la segunda, muy clara, la mandó arriba.
El primer tiempo terminó con una jugada de fútbol directo con Orbegozo otra vez como protagonista. No estuvo acertado y falló en la vaselina. Se marchó a vestuarios dándole vueltas a la cabeza. Cabizbajo. Pero iba a terminar feliz.
Problemas
El duelo subió de nivel en el segundo tiempo. La Gimnástica, horrenda en el primer periodo, enseñó algo de lo que tiene. Poco, pero llevó cierta sensación de peligro. Además, el partido se le puso muy cuesta abajo con la autoexpulsión de Pérez.
Vio una primera tarjeta injusta, pero luego cometió una falta estúpida que pudo complicar el encuentro. Hay que vigilar más esas acciones. La buena noticia es que Camus se solidarizó y siguió el camino de los vestuarios con otra actuación desacertada. Diez contra diez.
Con media hora por delante, se vio lo mejor de cada casa. Un duelo trepidante. Con más emoción. Cadamuro, que llevaba un rato en el lateral, envió un magnífico centro al meollo del área. ¿Quién estaba allí? El salvador. El que nunca hace nada. Orbegozo. Remate y para adentro. Tres puntos para la cazuela. Ojo a este Sanse.