Unos 175 ex integrantes del filial se han encontrado en Zubieta para conmemorar su creación
La pancarta Ongi Etorri Sanse, 1957-2007 ha lucido hoy sobre la verja de acceso a las instalaciones de Zubieta, precisamente para dar la bienvenida a los alrededor de 175 ex jugadores del filial txuri urdin y antiguos técnicos que han querido y podido acercarse a las instalaciones de la Real Sociedad para celebrar conjuntamente el 50 aniversario de la creación del equipo, que se cumplió el pasado 15 de septiembre.
Ha sido un acto entrañable, de abrazos y apretones de manos, entre gentes que en muchos casos no se veían incluso desde hace décadas, y que han recordado juntos sus años mozos en el equipo sobre el que se asienta la Real, el gran vivero. La presidenta, María de la Peña, el director deportivo Salva Iriarte y varios directivos más han acompañado a los invitados en esta soleada mañana de recuerdos y alegría.
Para empezar, todos los participantes se han sacado una foto de familia en las gradas del campo z1 de Zubieta. A continuación han asistido a una misa en la zona superior del edificio Garatu, oficiada por el señor Ramón Uribetxeberria, de Lasarte: "Hay gente a la que en su vida y en su carrera le habrá ayudado la religión", comenta éste, y en la misa se ha dado gracias al cielo por las bodas de oro de hoy, además de que "hemos recordado a los ex jugadores del Sanse que ya no están", ya que todos los integrantes históricos del filial "le dan mucha importancia a los amigos. Ellos también estarán celebrándolo con nosotros, desde arriba".Seguidamente, los antiguos futbolistas txuri urdin han dado una vuelta por los campos de entrenamiento y demás instalaciones de Zubieta, que a más de uno han dejado boquiabierto, puesto que no los conocían; y, para concluir el reencuentro, han asistido a un catering para almorzar juntos.
Volviendo la vista atrás.Pero lo que no han dejado de hacer ha sido charlar entre todos, viejos compañeros y amigos, con vivencias del pasado yendo y viniendo entre las bocas y oídos. Uno de los asistentes ha sido el mítico Luis Miguel Arconada (militó en el Sanse en el período 1970-74), quien ha explicado que tratar de nuevo "con gente que hace mucho que no has visto siempre trae muy buenos recuerdos. De pequeño, yo siempre iba a ver todos los partidos" del Sanse, "y fue una gran ilusión el día que pude jugar yo" en un conjunto que supuso "mi formación para seguir la carrera".Juanito Goiburu (1963-65) muestra orgulloso una vieja foto en blanco y negro, del año 1964: "Ese día jugaba España la final de la Eurocopa, y ganó 2-1" contra la URSS. "Y nosotros jugamos la final de la Copa de Gipuzkoa contra el Euskalduna, y también ganamos 2-1", rememora la coincidencia, a la vez que pone nombre a sus compañeros en la imagen, entre ellos "el difunto Paco Sein". El acto de hoy "me parece muy bien, porque cualquiera no llega a 50 años" y el filial txuri urdin lo ha hecho; además, se ha podido juntar "con la mayor parte de los que salen en la foto".Las imágenes que le vienen a la cabeza son "buenas, porque a esa edad -entré en el Sanse con 19 sin cumplir- todos los recuerdos son buenos". Y cree que no hay "ni comparación" entre los jóvenes de entonces y los actuales, porque "ahora lo tienen todo demasiado fácil; nosotros sí que hacíamos sacrificios" y, a su modo de ver, "los que ahora van a salir deportistas son los negritos y brasileños", es decir "los que pasan hambre". Aparte de eso, en aquellos tiempos los chavales sólo tenían ojos para dos especialidades deportivas: "Fútbol y pelota".
"Veo caras de grandes amigos".Durante el recorrido por las instalaciones, los participantes del entrañable encuentro de hoy han subido al campo z7, desde el que se domina todo el complejo de Zubieta XXI, y donde incluso algunos se han animado a tocar el balón y tirar unos tiros a los veteranos guardametas: "Aquello empezaba, y desde aquí vemos en qué ha terminado", dice Ramón Aznar, señalando con admiración los campos de entrenamiento que contemplaba en panorámica. "A ver si da los frutos que queremos", es decir "que deportiva y económicamente la Real vaya para arriba". De su época destaca que "los del vestuario éramos amigos de verdad", y de hecho junto a su ex compañero Azkarate habla de un día en el que "ganamos 6-1, yo marqué cinco goles y tú el otro, ¿te acuerdas?". Mikel Azkarate (1957-58) asiente, y añade que para él también "es una gran alegría juntarnos para una cosa tan significativa, y que después de tantos años lo podamos contar. Veo caras de grandes amigos", explica, "y yo esto de Zubieta no lo conocía, sólo la parte de abajo. Es fabuloso".Alfonso Núñez (1962-63) explica que él es de la época en la que se reinició el Sanse, puesto que el descenso de la Real a Segunda en los 60 arrastró al segundo equipo a Tercera ("cuando murió Kennedy", precisa), y con Javier Expósito de entrenador él y otros jóvenes ayudaron a devolver al filial a mejores cotas. "Aquí te encuentras a gente que hace años no veías, y hay una hermandad". Charla Alfonso con el ex guardameta Julio Marieta (1960-61), que vivió de cerca "y con pena" ese descenso de la Real porque formaba parte del primer equipo, donde no llegó a jugar Núñez. "Éste ganó más dinero que yo", se ríe Alfonso. "¿No se notaba?", sigue Julio con la broma.
"La cultura del esfuerzo y la constancia".Hablando de Expósito, que por supuesto también ha tomado parte en el encuentro, Eusebio Leranoz (1973-76) lo define como "un padre más" para él, "y tuve la suerte de ser uno de sus hijos preferidos. Soy poco aficionado a la melancolía", expresa el pamplonés, pero lo de hoy "ha sido muy agradable". Para él, el Sanse significa muchas cosas más allá del fútbol: "Salir de Pamplona, cambiar de ciudad, comer pescado", que en el interior era poco frecuente por entonces, "y los años de la muerte de Franco", en los que la Real "tenía mucho significado. Y aprendí aquí cosas que luego me sirvieron más allá del fútbol: la cultura del esfuerzo, la constancia y la determinación".Es bonito "ver gente con la que no has coincidido en 30 años", expresa Josean Olabarria (1974-75). Y los cambios habidos de esos años hasta la actualidad "no se pueden describir", comenta a su lado Jose Mari Txuri Blanco. "En nuestra época los medios eran escasos, o inexistentes. Entrenábamos en el hipódromo, como los caballos...". "Y el primer equipo Juvenil en Mundaiz, en un campo con piedras", complementa Olabarria. "Y ahora resulta que es el peor momento deportivo; es chocante", sigue Blanco. "O antes se hacían muy bien las cosas, o había leña de la buena", de la que arde bien. ¿No sería que no jugaban en Europa tantos brasileños? "Cuando hay buena cantera, no hacen falta brasileños", zanja Txuri. "Y además nosotros no mirábamos económicamente nada, no era más que fútbol. Ahora, en cuanto destacas, te rodea lo económico...".
"El Sanse es la base de este club".El actual director deportivo, Salva Iriarte (1969-76), resumía todo lo vivido por los veteranos txuri urdin, que una vez fueron jóvenes promesas en el Sanse: "Ha sido un día precioso", en el que el buen ambiente y el sol han acompañado, "y hemos recordado a un equipo que es la base de este club, el vivero. Para darle su verdadera dimensión, sería interesante saber cuántos jugadores del Sanse han llegado a Primera División, ya sea con la Real o en otros lugares". Innumerables, sin duda; "pocos equipos habrán dado tantos", y se espera que siga haciéndolo durante muchos años más.
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