Dos golazos de Aintzane Encinas e Itsaso Nabaskues les dan la victoria en el descuento.
Las chicas de la Real vuelven a sonreír. Algo más de mes y medio han necesitado las txuri urdin para conseguir la tercera victoria de la temporada y eso se notó ayer en la celebración. También contribuyó a la efusividad el hecho de que los goles de la victoria llegaran al final, uno a falta de cinco minutos y el otro en el 94, y fueran dos maravillas. Alegría desbordada y una gran piña que aplaudió a una grada que no descansa y anima a su equipo en cada segundo del partido. Todos merecían los tres puntos y se quedaron en casa.
La Real arrancó el partido recordando a sus mejores tiempos, metiendo al L'Estartit en su área a base de juego rápido y calidad. Pero a partir de la media hora el color del partido cambió, las txuri urdin empezaron a sufrir y 'Marigol' empezó a hacer de las suyas. La mexicana controló un balón con el pecho, lo levantó con la pierna derecha sobre sí misma y se sacó una volea con la zurda que Leire detuvo con apuros. Lo más destacado del primer tiempo.
En la reanudación, el L'Estartit siguió siendo superior, mejor plantado en el campo, y 'Marigol' volvió a inquietar primero y sirvió después un gran balón a Patricia, que marcó el 0-1 en el 68. La Real lo intentó y se acercó, pero sin crear ocasiones claras. Una nueva derrota sobrevolaba Zubieta. Pero entonces llegó la calidad y su aparición fue determinante. En el curenta, un balón largo a la espalda de la defensa gerundense sirvió para que Aintzane Encinas marcara el empate con una precisa vaselina sobre Noelia. Golazo, un punto y mal menor pensaron muchos, pero se equivocaron porque en el 94 Itsaso Nabaskues deleitó a la grada. Levantó un balón que peleó con rabia y, sin dejarlo botar, lo puso en la escuadra con el exterior. ¡Qué lujazo!
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