La Real desaprovecha una gran oportunidad de conseguir los tres puntos.
La Real Sociedad y el Celta ofrecieron un gran encuentro de fútbol en un estadio de Anoeta que, durante algunos minutos, presenció fútbol de primera división entre dos históricos, en un partido mediatizado por la labor arbitral al dejar al equipo vigués con diez hombres casi desde el pitido inicial.
El choque tuvo una brillante primera mitad, en la que no hubo un solo instante de desperdicio desde que, justo al comienzo del partido, el árbitro expulsaba al guardameta Pinto, por un penalti cometido sobre Larrea, decisión un tanto rigurosa y un excesivo castigo para los gallegos que tuvieron que afrontar 89 minutos en inferioridad.
El especialista de la Real para las penas máximas, Gerardo, no tuvo fortuna en esta oportunidad y erró su primer penalti de la temporada, al enviar el balón rozando el larguero de la portería que defendía ya el suplente Esteban.
Los donostiarras trataron de aprovechar su posición de privilegio y disfrutaron de varias llegadas claras, siempre conducidas por un Gerardo que trató de enmendar su error con un fútbol de muchos quilates.
El premio para el conjunto guipuzcoano llegó en el minuto 23 en una acción iniciada por el propio Gerardo con un centro al área que nadie acertó a despejar para que el argentino Víctor López, de extraño cabezazo, batiera a Esteban.
Parecía que el encuentro estaba ya definitivamente encarrilado para la Real y que el Celta iniciaría una búsqueda suicida del empate que terminaría por decantar el choque a favor del equipo vasco en alguno de sus contraataques.
Nada de esto sucedió, López Caro pidió tranquilidad a sus jugadores y que esperaran su momento para equilibrar la diferencia, algo que llegaría en el minuto 30 en un estupendo remate de Jorge que se coló como un cohete hasta el fondo de la red de la portería que defendía, hasta ese momento con gran acierto, Asier Riesgo.
El partido mantuvo la igualdad en una segunda mitad en la que la Real apretó el acelerador para tratar de imponerse por la vía más rápida, pero se encontró con una férrea oposición defensiva del Celta y una salida fulgurante a la contra de los vigueses que le creó muchos problemas.
Mikel Labaka, antes de retirarse lesionado, tuvo en sus botas el gol de la victoria cuando disparó con todo a su favor y la única oposición de Esteban, pero el balón se le marcharía muy desviado.
El conjunto celtiña, que seguía replegándose y estirándose como un acordeón, tuvo también una clara oportunidad para marcar el 1-2 en el minuto 60, en un mano a mano del argentino Perea con Riesgo en el que el portero de la Real salió victorioso.
Los últimos minutos del choque fueron claramente ya del Celta que no notaba los efectos de la inferioridad y buscó con descaro llevarse el partido, aunque finalmente el reparto de puntos puede considerarse justo.
Real Sociedad : Riesgo; Gerardo, Labaka (Mikel González, min 63), Víctor López, Carlos Martínez; Larrea (Stevanovic, min. 46), Aranburu, Garitano, Xabi Prieto, Elustondo (Uranga, min. 60); Delibasic.
Celta: Pinto; Lucas, Rubén, Lequi, Lago; Canobbio (Suarez, min, 78), Vitolo, Jorge (Agus, min. 60), Nuñez; Quincy (Esteban, min. 4), Perera.
Goles: 1-0, min. 23: Víctor López. 1-1, min. 30: Jorge.
Árbitro: Del Cerro Grande (Madrid). Mostró tarjeta roja a Pinto en el minuto 1 por trabar en su área a Larrea siendo último jugador. Amonestó a Gerardo, Víctor López, Lucas.
Incidencias: 14.400 aficionados en Anoeta en partido declarado como 'Día de ayuda al club'.
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