Con su habitual moderación, Lasarte se mostró satisfecho con lo sucedido en el terreno de juego de Lasesarre ayer durante los 90 minutos de juego, aunque no dudó en reconoce que a su equipo le había costado entrar en el partido: "En los primeros 15 minutos nos costó coger el ritmo de partido, no estuvimos bien, pero en líneas generales, tuvimos buena posesión de balón y convertimos cara al arco rival".
Es su segundo partido al frente de la Real y, de momento, el balance es muy positivo: dos victorias, ocho goles a favor y uno en contra, aunque contra equipos de inferior categoría. El míster observó aspectos positivos en el fútbol de su equipo ayer: "Sea al rival que sea, siempre es importante ganar. En la fase ofensiva, el equipo tuvo momentos buenos y de los otros. Ahí nos falta un poco más de trabajo y la incorporación de algún compañero. Además, tuvimos tino para acertar las ocasiones, algo que no es nada sencillo".
También alabó el criterio con el que su escuadra movió la pelota en la zona ancha: "No juega por jugar la pelota", resume. También puso el acento en las prestaciones defensivas: "Creo que estuvimos correctos, más allá del fallo del gol. Lo más importante es que hay un lugar firme para apoyarse".
No quiso cebarse con Toño Ramírez, que cometió un error de bulto en el gol del Barakaldo al no atrapar el balón en su salida, lo que facilitó el tanto fabril: "Esas cosas pasan. Es una pena, porque queda esa sensación ahí. Algún portero famoso dijo que para ser un gran portero te tienen que meter un gol tonto".
Feliz con Griezmann
Lasarte es consciente de hay que andar con pies de plomo con Griezmann y con todos los chavales a los que está haciendo jugar y por eso es cauto y mide los elogios. "A mí no me gusta quemar a los chavales, ni utilizarlos por utilizarlos, que anden subiendo y bajando. Quiero ser muy cuidadoso con eso".
Sin embargo, el técnico no ocultó que "si le hemos hecho repetir a Antoine es porque le hemos visto buenas cualidades. Hasta ahí voy a hablar. Convertir cuatro goles en 90 minutos no es mala cosa. Estamos en presencia de un buen proyecto, pero sólo eso", volvió a comentar haciendo hincapié en su idea de no generar falsas expectativas.
Por lo demás, el técnico txuri urdin se lamentó de las lesiones que están asolando a la Real durante los últimos días y que ayer volvieron a lastrar al equipo con el percance de Asier Riesgo. Admitió asimismo que, a consecuencia de ellas, "Nsue vino obligado. Esta mañana entrenó fuerte y ha llegado apagado de energía"
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